EL CABLE AÉREO DE LAS MINAS DE «EL TESORERO»

Introducción

La Sierra de Baza se encuentra integrada en el Parque Natural del mismo nombre y ocupa una extensión de casi 52.400 hectáreas. La diversidad ecológica y de recursos naturales favoreció su poblamiento continuado desde hace al menos 7.000 años. Entre dichos recursos se encuentran la variedad y abundancia de diversos minerales. De este modo, la extracción mineral es una de las actividades económicas más antiguas, arraigadas e importantes a lo largo de la historia de la ocupación humana en la comarca. Se tiene conocimiento de esta actividad en la Edad de los Metales, en la época romana, así como en tiempos de la dominación musulmana (https://sierradebaza.org/reportajes-web/sierra-de-baza-presencia-humana).

Entre finales del siglo XIX e inicios del XX, y al amparo de la puesta en servicio de las líneas ferroviarias de  Linares a  Almería, Moreda a Granada, Guadix a Baza y Lorca a Baza y Águilas, se inició una frenética actividad minera en las sierras penibéticas de las provincias de Almería y Granada, especialmente de mineral de hierro, cuya  rentabilidad dependía muy mucho de un medio de transporte de gran capacidad y costes ajustados, que acercara el mineral al punto más próximo por el que pasase el ferrocarril y éste, a su vez, al puerto más cercano (Almería o Águilas) para su posterior envío a la industria siderúrgica.

En el caso de la Sierra de Baza los ejemplos más importantes correspondieron a dos modestas explotaciones hoy todavía bastante desconocidas: el grupo de minas El Tesorero en el término municipal de Baza y el coto minero de Las Piletas en el término de Huéneja.

Las minas del Tesorero, situadas en pleno corazón de la Sierra de Baza y con un acceso bastante complicado, pudieron ser explotadas con cierta rentabilidad gracias a la instalación de un cable o tranvía aéreo (como se llamaba por entonces), que transportaba el hierro del coto minero a un punto del ferrocarril del Great Southern of Spain Railway (el kilómetro 108,100), entre las estaciones de Hijate y Serón. La actividad minera y otras asociadas al aprovechamiento de los recursos serranos originó el establecimiento de varios asentamientos ―El Tesorero, Los Moralicos, Cortijo de Don Martín, Benacebada, Bailén, Los Rodeos― en torno a la parroquia de San Nicolás del Moro.

Vista de la ermita de San Nicolas del Moro, agosto de 2006. Autor Carlos Peña Aguilera.

En este artículo se pretende ofrecer un recorrido por la historia del enclave minero del Tesorero haciendo especial hincapié en la descripción de las instalaciones y de las vías de transporte asociadas basándose en documentación  histórica  y  en  la exploración sobre el terreno realizada por un grupo de la Asociación de  Amigos del Ferrocarril de Almería (Asafal).

Historia

La primera referencia a la aldea de El Tesorero se remonta al Catastro de Ensenada de 1743, donde se sitúan varias viviendas agrupadas en torno a  lo  que  se  conocía  como  Cortijo  de  El Tesorero. Esta aldea situada a 1.600 metros de altitud, a la solana y junto al arroyo Uclías, conoció su máximo esplendor a finales del siglo XIX y principios del XX gracias a la riqueza mineral de la zona. El trabajo en las cercanas minas permitió el asentamiento de numerosas familias en esta aldea cuya  riqueza de agua facilitó las labores agrícolas en pequeños bancales ganados al monte (https://sierradebaza.org/secciones/municipios-y-aldeas/aldeas/el-tesorero).

Vista de la aldea de El Tesorero, agosto de 2006. Autor Carlos Peña Aguilera.

A finales de  1906 se constituyó la Sociedad Anónima Minas del Tesorero, con un capital social de 800.000 pesetas dividido en 400 acciones de 2.000 pesetas y domicilio social en la calle Los Madrazo número 27 de Madrid (sede de la casa de banca Hijo de A.G. Moreno y Sobrino). El valor nominal de las acciones fue modificado en Junta General Extraordinaria de 21 de noviembre de 1907. Los socios fundadores eran José Arroyo Rodríguez, de Cartagena, Gregorio Conesa Vera, de La Unión, y José Luis Moreno Hernández, de la casa de banca de los señores Hijo de A. G. Moreno y Sobrino, de Madrid. El objeto de la empresa era la explotación de un coto de minas de plomo argentífero en la Sierra de Baza, arrendado por los señores Arroyo y Conesa con opción de compra. Dichos señores recibieron por el aporte de su contrato 100 acciones liberadas y el resto de los títulos estaban suscritos por los señores Moreno. No obstante, la explotación se centró en la extracción de mineral de hierro. Se desconoce si hubo una redirección en el objetivo o  si se trata de un error de la publicación de referencia (Revista  Minera  Metalúrgica  y  de  Ingeniería, número 2113, mayo 1907, p.254 y 2121, julio 1907, p. 360).

Acción de la sociedad anónima Minas del Tesorero. Colección Carlos Peña Aguilera.

El extenso coto minero estaba formado por los siguientes registros en propiedad: María Florencia Rosa, Espanta Pájaros, Rosario, Don Perfecto, Jose Luis, Gregorio, Consuelo, San Antonio, Adelaida y José Arroyo así como otros tantos en arrendamiento, entre los cuales se encontraban las minas Hernán Cortés, de la sociedad San José; El camino, Emilita, San Luis y Esmeralda, pertenecientes a la sociedad Tres Amigos; Combinación, de la sociedad La Casualidad; Electra, Pascualita, Manolito, Paris, pertenecientes a la sociedad Cuatro Amigos. Los contratos societarios estipulaban el abono de 500.000 pesetas, un canon de 0,65 pesetas por tonelada y la obligación de instalar un cable aéreo para el transporte de minerales (Criaderos de Hierro de España, tomo V,  Hierros de Almería y Granada, vol.III, p.420). Las investigaciones realizadas hallaron importantes criaderos de hierro que contenían hematites cuya ley no bajaba del 60 por cien y se negociaba con otros propietarios para poner en actividad concesiones mineras cercanas. En  1907 se contrató con la casa Adolf  Bleichert, de Leipzig, la instalación de un cable de 15,5 kilómetros al punto más cercano del ferrocarril Lorca-Baza-Águilas (Revista Minera Metalúrgica y de Ingeniería, número 2121 julio 1907, p.360).

Plano topográfico y de los registros del coto minero de El Tesorero. Criaderos de Hierro de Almería y Granada, tomo III, p.423.

El 5 julio de 1909 se  aprobó la Real Orden que autorizaba la concesión y ocupación de terrenos de dominio público para la construcción del cable aéreo entre las minas y el kilómetro 108 de la línea ferroviaria de Lorca a Baza (Gaceta de los Caminos de Hierro, 16-08-1909, p. 373). A lo largo de ese año se preparaba el inicio de los trabajos en el filón más cercano a la estación de carga del cable perteneciente al registro número 21.672 denominado Hernán Cortés. Dicho filón vertical había sido reconocido y contenía hematites de gran pureza hasta una profundidad de 130 metros y carbonatos en otros 30 metros más, además de una veta de mineral piritoso de cobre, por lo que se anunciaba la construcción de planos inclinados exteriores y hornos de calcinación de carbonatos. A la vez se iniciaron trabajos en las minas Electra y Emilita entre otras (Revista  Minera  Metalúrgica y de Ingeniería, número 2214, julio 1909, p. 330).

Trabajos en la mina Hernán Cortés. Criaderos de Hierro de Almería y Granada, tomo III, fotografía 44.

De todo ello se esperaban unos prometedores resultados. Para completar los gastos de instalación, la sociedad obtuvo una cuenta de crédito en el Banco de España por valor de 300.000 pesetas y realizó una emisión de obligaciones por valor de 530.000 pesetas para compra de terrenos, materiales, montaje del cable, construcción de tolvas y plano inclinado, etc., manteniendo el capital social inicial de 800.000 pesetas. La explotación contaba con 618 pertenencias mineras en propiedad y 267 en arrendamiento. Se esperaba el inicio de la actividad a lo largo del segundo semestre de  1909  (El Financiero Hispano-Americano, 18-06-1909, p.533 y La Ilustración Financiera, 20-06-1911, p.358).

A finales de 1912 se constituyó la Sociedad Minera Hispano-Holandesa cuyo objeto era la explotación de minas, y en especial, las que pertenecieran a la sociedad Minas del Tesorero (El Financiero Hispano-Americano 20-12-1912, p.919). A primera vista, esta nueva empresa no tendría nada que ver con la anterior, pero las ampliaciones de información confirmaban lo contrario. Esta sociedad, domiciliada en Cartagena, Plaza de Risueño, 5, pretendía continuar los trabajos y ampliar las investigaciones practicadas en el coto minero que la antigua sociedad Minas del Tesorero le había cedido en arriendo por 30 años, con opción de compra. La gerencia seguía recayendo en José Arroyo Rodríguez, socio fundador de la Sociedad Anónima Minas del Tesorero y dueño de gran parte de los registros mineros. La sociedad estaba formada por capitales extranjeros y nacionales, representando intereses de la naviera  holandesa Vandersie, el banco de Rotterdam y quizás la casa alemana Krupp. El Consejo de Administración estaba formado por Mr. Van Es (Presidente), Mr. Wiser, Monsieur Egletbech y los banqueros de Cartagena, Juan y José Sánchez-Doménech (Revista Minera  Metalúrgica y de Ingeniería, número 2382, enero1913, p.6 y El Financiero Hispano-Americano 14-02-1913, p.126).

Se desconocen si los motivos de este cambio societario eran de insuficiencia técnica y de medios, o si por el contrario, era debido a alguna cuestión financiera. De lo que sí hay constancia es de la demanda interpuesta por Rosario Palma y Giménez, viuda de Federico Luque de Velázquez, marqués de Luque y alta personalidad de las finanzas españolas del último tercio del siglo XIX. Se reclamaba el pago de 265.000 pesetas, intereses y costas judiciales contra Minas del Tesorero, cuya providencia judicial del juzgado de primera instancia del distrito de la Universidad de Madrid fue fechada el 21 de enero de 1914 (Diario Oficial de Avisos Madrid, nº 19, 24 -01-1914). No se ha encontrado constancia documental de la relación mercantil de la familia Luque con la sociedad minera.

Imágenes de la zona minera, restos de la carga del cable y de la casa de dirección. Autor Antonio Aguilera Cantón.

Este intento por mejorar la explotación a través de la nueva Sociedad Hispano-Holandesa no dio los resultados esperados  a pesar de que se realizaron exploraciones en las cercanías de la estación intermedia del cable, llamada El Corbul, en el término municipal de Alcóntar. Los datos ofrecidos en la obra Hierros de Granada y Almería de los ingenieros de minas Ricardo Guardiola y Alfonso Sierra son contradictorios o requieren alguna explicación de la que no se dispone: el coto minero arrojó una producción total de aproximadamente 316.000 toneladas (180.000  a cargo de Minas del Tesorero y 136.000 por parte de Hispano-Holandesa) (tomo III p.447), pero se transportaron 168.199 por el ferrocarril de Lorca a Baza y Águilas, según datos facilitados por el Director de la Compañía, Sr. Boag por lo que se desconoce el destino de 147.801 toneladas (Memorias del Instituto Geológico y Minero Criaderos de Hierros de España, tomo V, Hierros de Granada y Almería, tomo I, capítulo IX, fig.2.). La cantidad de mineral que se suponía en la mina Hernán Cortés era de 3.000.000 de toneladas, cifra que justificaba la movilización de capitales y el importante desembolso en instalaciones de transporte. Un cálculo posterior arrojó los siguientes resultados para las distintas minas productivas: Hernán Cortés, 655.215 toneladas; Emilita y Paris, 189.000 toneladas; Electra y José Luis, 202.500 toneladas, haciendo un total de 1.041.500 toneladas. Cuando los trabajos de laboreo adquirieron desarrollo, se realizó de nuevo un estudio de cubicación donde se calculó en 482.000 toneladas el hierro de la mina Hernán Cortés. Los estudios de exploración, que exigían nuevas inversiones, no se completaron en el resto de minas y la producción obtenida no cubrió los altos costes de las instalaciones de transporte, especialmente el cable aéreo y los depósitos de mineral, cuyo valor ascendió a 1.025.000 y 144.500 pesetas respectivamente (Criaderos de Hierro de España, tomo V, Hierros de Almería y Granada, vol.III, pp.448-455).    

La ejecución de sentencia siguió su curso y el 7 de junio de 1920 se sacó a pública subasta con una rebaja del 25% todo el inventario de bienes de la Sociedad Minas del Tesorero para saldar una deuda que ascendía a 977.519,12 pesetas (BOP Madrid, nº 139, 11-06-1920, pp. 2-3). Al final de este artículo se encuentra el inventario de los bienes subastados.  

A partir de aquí esta fecha se pierde el rastro documental de ambas sociedades, siendo el cable aéreo desmontado y vendido (Criaderos de Hierro de España, tomo V, Hierros de Almería y Granada, vol.III, p.422).

DESCRIPCIÓN DE LAS INSTALACIONES DE TRANSPORTE

Para la descripción de este apartado se han reunido los datos históricos que referencian los bellísimos parajes de la Sierra de Baza visitados por un grupo de aficionados de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Almería. Las principales instalaciones de transporte se ubicaron en el entorno de la mina Hernán Cortés, muy cerca del poblado de El Tesorero. 

El plano inclinado y las vías mineras

El plano inclinado y las vías mineras sirvieron para el transporte del mineral de la mina Hernán Cortés a la tolva de carga del cable aéreo. Las labores se realizaron mediante pozos y galerías a seis niveles diferentes, en la que cada planta disponía de vía minera de 500 mm para vagonetas. El plano, disponía de una longitud de 375 metros, doble vía, carrillo portador de dos vagonetas, cable tractor de 20 mm y cuatro estaciones de carga (superior, inferior e intermedias). A la estación superior llegaba una vía de 80 metros de longitud procedente del socavón 1 situado en la planta más alta. La segunda planta comunicaba con la estación intermedia a través de una vía minera de 175 metros que partía de la galería 6. La tercera planta lo hacía con otra estación intermedia a través de una vía de 260 metros a través de la galería 7. La estación inferior se situaba en la quinta planta junto a la salida del socavón 2. La capacidad era de 200 toneladas diarias y su coste ascendió a 25.500 pesetas (Criaderos de Hierro de España, tomo V, Hierros de Almería y Granada, vol.III, p.446).    

El  cable  aéreo

La descripción de esta instalación de transporte es posible con tanto nivel de detalle gracias al artículo publicado en diciembre de 1910 en la Revista Minera  de Metalurgia y de Ingeniería (2283, diciembre de 1910, pp. 613-615), a la descripción realizada en el volumen III de la obra Criaderos de Hierro de España, tomo V,  Hierros de Almería y Granada pp. 446-48) y al inventario de material subastado reflejado en la ejecución de sentencia (BOP Madrid, nº 139, 11-06-1920, pp. 2-3) y al libro Funiculares Aéreos de Fernando Baró.

Perfil longitudinal e imágenes del cable aéreo. Lámina XV, Funiculares Aéreos.

Características técnicas

La vía aérea de las minas de El Tesorero fue construida según el sistema patentado de la casa Adolf Bleichert y Compañía, de Leipzig Gohlis, sobre una longitud de 15,5 kilómetros, dividida en dos secciones, la primera desde la estación de carga hasta la estación de ángulo en la zona del monte El Corbul, de unos 7,5 kilómetros, y la segunda desde este punto hasta la estación de descarga en el apartadero del ferrocarril Lorca a Baza y Águilas. El desnivel superado era de 585 metros, favorable al transporte.

Fotografía de Adolf Bleichert, Catálogo Bleicher y Cª. Colección Carlos Peña Aguilera.

La capacidad de traslado oscilaba entre las 31,5 y las 40 toneladas por hora según el peso específico y el grado de humedad del mineral. La velocidad de desplazamiento de las vagonetas era de 2,5 m/s.

El cable aéreo era del tipo conocido como tricable, que como muy bien explica Fernando Baró en su libro Funiculares Aéreos consistía en «dos cables-vías y un tractor sin fin; por uno de los primeros ruedan las vagonetas cargadas y por el otro las descargadas, yendo todas sujetas al tractor por unas pinzas de diversos sistemas, cuyo funcionamiento suele estar dispuesto de manera que el acoplamiento en las estaciones se realice automáticamente» (op.cit. p. 165).

En el caso del sistema Bleichert, la mordaza o aparato acoplador al cable tractor, que se denominaba «autómata», se situaba por debajo del cable vía o portante. El efecto de movimiento en la dirección necesaria se establecía aprovechando el propio peso de la vagoneta, cuestión conocida como suspensor con carga suspendida. El deslizamiento de arriba a abajo de la vagoneta sobre el cable hacía que un perno central actuara sobre el brazo largo que sujetaba la carga, ejerciendo a su vez palanca sobre el aparato acoplador que constaba de dos mandíbulas, una móvil y otra fija a un carrete corredizo. Esto hacía que, según las pendientes de la línea, el cable tractor fuera agarrado con una determinada fuerza y evitara el deslizamiento del aparato acoplador. Este sistema permitía el uso de cables tractores de diferentes grosores. La vía de El Tesorero utilizó cables de diferente diámetro en los portantes, siendo el de mayor grosor para las vagonetas cargadas.

El enganche y desenganche de los acopladores al cable tractor se realizaba automáticamente, de modo que el perno iba provisto de dos rodillos, uno a cada lado, que corrían en las estaciones sobre unos carriles secundarios con una pequeña rampa para las vagonetas entrantes y una ligera pendiente para las salientes, permitiendo así el desacople y acople respectivo del aparato «autómata» al cable tractor.

Explicación del sistema “autómata”. Catálogo Bleichert y Cª. Colección Carlos Peña Aguilera.

Las 310 vagonetas que disponía esta vía iban separadas a una distancia mínima de 2,5 metros y los cables portadores iban sujetos a 148 castilletes de hierro de altura variable, según las condiciones del terreno. Además, se dispusieron cuatro castilletes gemelos en atención a dos importantes tramos de vía libre de sujeción o pandos de entre 500 y 600 metros de longitud.

Debido a la notable longitud del cable se hizo necesaria la instalación de dos aparatos de tensión intermedia de los cables vía.

En la estación de ángulo se realizaba el trasvase manual de las vagonetas a cada uno de los dos tramos de la vía aérea, el de bajada o el de subida. Aquí también fue instalado el mecanismo de tracción o  movimiento de la línea. Para la primera sección de la línea se requería una fuerza media de 17 caballos, proporcionada por un locomóvil de 40 caballos, mientras que en la segunda se producía un exceso de fuerza de 30 caballos, por lo que incorporaba un regulador de freno hidráulico con el que poder  moderar la velocidad de la línea.

Las estaciones de carga, de ángulo y de descarga

La estación de carga se instaló lo más próxima posible a la zona de labores mineras. El mineral transportado desde la mina mediante vagonetas a través del sistema de vías y plano inclinado de ancho 500 mm, era vaciado en una tolva de depósito desde la que se realizaba la carga de los baldes aéreos por un sistema de compuertas.

La estación de ángulo situada en las cercanías del monte El Corbul tenía por objeto dividir en dos secciones la importante longitud de la vía aérea y corregir levemente la dirección hacia la estación de descarga debido a las difíciles condiciones orográficas.

La estación de descarga se hallaba instalada al pie de una pequeña ladera con un ligero declive, quedando a una altura de 11 m sobre el nivel de la vía. La fachada de dicho descargadero disponía de una longitud de 30 m y su base estaba reforzada con un muro de piedra. Una estructura montada sobre el mencionado muro, en suave pendiente, formaba un depósito con una capacidad de 50.000 toneladas de mineral que permitía cargar los vagones del ferrocarril en la vía de apartadero a través de 12 vertederas levadizas dispuestas a lo largo del depósito. Del mismo modo, una vía aérea suspendida y que sobresalía de esta estructura, permitía la descarga directa de los baldes sobre los vagones, así como las operaciones de subida al cargadero de la mina una vez vacíos. Para la realización de las maniobras ferroviarias, el apartadero contaba con dos vías, una para la carga y la otra para las operaciones de incorporación a la vía general (Trenes, Cables y Minas de Almería, pp.195-196).

Obras de construcción del apartadero y cargadero en el pk 108 de la línea del ferrocarril de Lorca a Baza y Águilas. En vistas características de los ferrocarriles españoles, The Railway Gazette, 28-04-1930.
Aspecto del conjunto del apartadero ferroviario, estación de descarga y depósito de mineral en el pk 108. Foto de Gustave Gillman.
Restos del apartadero en el km 108 y señal identificativa. Autor Antonio Aguilera Cantón.

 

Autor: CARLOS PEÑA AGUILERA

Fuentes y Bibliografía

La bibliografía básica consultada ha sido:

Funiculares Aéreos de Fernando Baró, editorial Adrián Romo, edición de 1918.

Minas y Mineros de Granada  de Arón Cohen Amselem, publicado por la Diputación de Granada en 2002 dentro de la colección Los Libros de la Estrella.

Trenes, Cables y Minas de Almería de José Antonio Gómez Martínez y José Vicente Coves Navarro, publicado por el Instituto de Estudios Almerienses en 2000.

La web sierradebaza.org de la revista electrónica Proyecto Sierra de Baza ha sido la fuente documental para los datos generales de la Sierra de Baza y de la aldea de El Tesorero.

Se han consultado expedientes mineros y del archivo de minas sobre la zona de El Tesorero en el Archivo Histórico Provincial de Granada.

La totalidad de los nuevos datos aportados proceden de publicaciones históricas digitalizadas (BOP (Madrid y Granada), BOE (Gaceta histórica), Hemeroteca Digital BNE, Biblioteca Digital de Andalucía, Biblioteca Virtual de Prensa Histórica y las publicaciones relacionadas con minería disponibles en la biblioteca digital del IGME (Instituto Geológico y Minero de España).  Para las visitas de campo se contó con la presencia de grandes aficionados al ferrocarril vinculados a la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Almería (ASAFAL).

ANEXO- INVENTARIO BIENES SUBASTA:

En virtud de providencia dictada en 4 del actual por el Sr. D. José Manuel Puebla y Aguirre, juez de primera instancia del distrito de la Universidad, de esta Corte, en autos ejecutivos seguidos por la Excma. Sra. Doña Rosario Palma y Jiménez, marquesa viuda de Luque, contra la sociedad anónima Minas del Tesorero, se sacan a la venta en pública subasta por segunda vez, con rebaja del 25% de la cantidad de 977.519,12 que sirvió de tipo para la primera, los bienes siguientes:  

– Minas de hierro propiedad de la sociedad demandada, sitas todas ellas en el término municipal de Baza, provincia de Granada

– Mina José Luis, de 24 pertenencias, tasada en 20.000 ptas.; Mina María Florencio y Rosa de 57 pertenencias tasada en 6.000 pesetas; Mina Rosario de 57 pertenencias tasada en 4.000 pesetas; Demasía de la mina Rosario, de 18.684 m2 y 9dm tasada en 2.000 pesetas; Mina Espanta Pájaros de 27 pertenencias, tasada en 2.000 pesetas.

– Derecho real de arrendamiento o partido por 30 años, desde que las escrituras se otorgaron sobre las minas de hierro siguientes:

Sitas en término de Baza

Mina Hernán Cortés de 42 pertenencias, tasada en 40.000 pesetas; Mina París de 15 pertenencias tasada en 0.000 pesetas; Mina Esmeralda de 8 pertenencias tasada en 2.000 pesetas; Mina Electra, de 18 pertenencias tasada en 20.000 pesetas; Mina el Camelo de 30 pertenencias tasada en 3.000 pesetas; Mina Emilita, de 6 pertenencias, tasada en 6.000 pesetas.

En término municipal de Alcóntar provincia de Almería

Mina Alquife, de 66 pertenencias, tasada en 2.000 pesetas; Mina Ojos Negros, de 26 pertenencias, tasada en 6.000 pesetas; Demasía a Ojos Negros, de 51.000 metros de extensión superficial, tasada en 4.000 pesetas; Mina Mi Blanquita, de 63 pertenencias, tasada en 25.000 pesetas; Demasía a la mina Mi Blanquita de 59.614 metros 31 cm2, tasada en 2.000 pesetas.

Mina subarrendada a la sociedad Minas del Tesorero

Mina Pepín, en el término de Alcóntar, de 12 pertenencias, tasada en 50.000 pesetas.

Inmuebles

Término de Baza

Casa Oficina de las minas en terrenos de la propiedad de la Sociedad Minas del Tesorero y de la Mina Hernán Cortés, tasada en 5.000 pesetas.

Molino harinero denominado del Zapo, ruinoso, tasado en 2.400 pesetas.

Trance de tierra de 2 has. 49 áreas y 15 centiáreas, en el paraje Canal del Arroyo de Uclías, tasado en 1.200 pesetas.

Tierra de 3 has. 86 áreas y 37 centiáreas, en el paraje del Moro, con 21 casitas para obreros, tasada en 400 pesetas.

12 pequeños trozos de terreno sobre los que se apoya un cable aéreo, cuya descripción y linderos constan en los autos y el derecho real de servidumbre para construir los pontones para la instalación del mismo cable, con una valoración de 170, 22 pesetas.

Término de Purchena provincia de Almería

54 pequeños trozos de terreno sobre los que se apoya un cable aéreo, cuya descripción y linderos constan en autos, valorados en 1.379,60 pesetas.

Un cable aéreo apoyado sobre los 67 trozos de terreno indicados de 15 km, 800 m de extensión lineal y con la latitud de 5 metros, compuesto de una estación de carga, 148 castilletes de hierro, 5 estaciones intermedias y una estación de descarga en el km 108 de la línea férrea de Lorca a Baza, con cable, carriles y tractor, cajas vagonetas, una caldera tubular y otra fija de 40 CV, con una chimenea de chapa de 25 metros de altura, más un freno de paletas. Lleva anejos un almacén en la estación de descarga, un edificio para la maquinaria del cable, una casa para vivienda, 4 casas para vigilancia y almacenaje del cable y una caseta conteniendo la báscula del transporte aéreo, tasado en 700.576 pesetas.

2 casetas para el servicio de la mina Electra tasadas en 125 pesetas.

1 caseta fragua próxima a la mina Hernán Cortés, tasada 50 pesetas.

Unos cuarteles derruidos para obreros, situados en las proximidades de las minas, tasados en 100 pesetas.

Material de repuesto del cable

49 poleas de diferentes diámetros, locas de arrollamiento y diferenciales, tasadas en 5.879 pesetas.

1 gato de cremallera, 5 ganchos para carga, 1 soporte, un cable de 2 ruedas, 8 tubos de caldera de 5 m de longitud, 1 bomba de mano, 1 tubo de limpieza, 1 corcha de freno, 36 llaves de maquinaria, 2 llaves inglesas y 1 francesa, 1 trócola y trepador para el teléfono, 3 terrajas, 1 tornillo de mano, enchufes y clavos, 2 depósitos de aceite, 1 piedra de afilar, 7 tubos de empalme del cable, 1 sostén, 11 placas para reparación del cable, 2 llaves de cadena y 7 soportes del cable, tasado en 1087 pesetas.

2 cabrestantes con cable metálico, 2 fraguas fijas y 1 portátil, 1 máquina taladradora con el volante roto, un tornillo de herrero, 1 gato de cremallera, 6 martillos y 11 tenazas, 1 maroma de esparto, 1 puerta de dos hojas, 4 rollos de espino artificial, 1 pisón y 3 martillos, tasados en 1.474 pesetas.

35 m de tubería de hierro de 60 mm, 20 m de tubería de rosca de 40 mm y 10 de tubería de plomo 50 mm, 2 ejes del cable, 2 tambores de tomo, 1 fragua portátil, varias palancas y hierros viejos, 1 cuba de lavar mineral, tornillos y pasadores, 1 maroma de esparto, 25 ruedas de carrillo de mano, 2 bancos de carpintería, hornilla, frascos, crisoles, 3 sierras, 1 caja de teléfono, 1 taquímetro, 1 mira, 4 jalones, 4  tercerolas, 1 báscula y 2 farolas, tasado en 2.597 pesetas.

20.700 kg de aproximadamente de carriles perfil vignole instalados en el plano inclinado, tasado en 12.109,50 pesetas.

6.040 kg aproximadamente del mismo perfil, tasados en 2.948 pesetas.

20.388 kg aproximados de carriles del mismo perfil, tasados en 9.687,60 pesetas.

Traviesas de hierro en cantidad aproximada de 2.700 y eclisas y tornillos de vía, tasado en 2.900 pesetas.

40 vagones de mina, tasados en 12.800 pesetas.

2 bastidores y 5 cajas sueltas de vagones y 16 cambios de vía, tasados en 1.630 pesetas.

Una placa para los vagones sin volas [sic] y otra placa con ellas, tasado en 1.470 pesetas.

Aparato completo de arrollamiento y freno para el plano inclinado, tasado en 600 pesetas.

17 picos, 35 palas, 34 mazas, 42 rustros, 11 cucharillas para barrenos, 5 barrenas, 3 punteros, 1 azuela y 5 sierras, tasado en 425,50 pesetas.

Todo lo reseñado sale a subasta en un solo lote por la cantidad total de 733.139,34 pesetas y se advierte:

Que no se admitirán posturas que no cubran las 2/3 partes de dicha cantidad, que sirve de tipo para la subasta.

Que para tomar parte en la misma deberán los licitadores consignar previamente en la mesa del juzgado o en el establecimiento destinado al efecto el 10% efectivo del indicado tipo, sin lo cual no serán admitidas sus proposiciones.

Que para el remate se ha señalado el día 22 de julio próximo, a las 10 de la mañana en la sala de Audiencia de este Juzgado.

Y que los títulos de propiedad se hallan de manifiesto en la secretaría, con los cuales tendrán que conformarse los que se interesen en la licitación, sin poder exigir otros.

Madrid, 7 de junio de 1920 El Juez de primera instancia Jose M Puebla. El secretario, Felipe González Bernabé.   

 

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